Este mes en el blog de CRAR – Centro de Rehabilitación Animal de Referencia, especialistas en fisioterapia veterinaria en Barcelona, queremos hablaros del uso combinado de dos electromedicals que hace optimizar los resultados de la terapia de rehabilitación: la radiofrecuencia INDIBA y la terapia láser K-Láser.
Primero, nos gustaría dejar claro que las herramientas de rehabilitación no nos hacen ser expertos en rehabilitación, si no que siempre las adecuamos a un plan de rehabilitación y unos objetivos.
Dicho esto, estas herramientas nos ayudan mucho a mejorar los resultados de la terapia.
Enfoque holístico y multimodal de la rehabilitación
La misión de los veterinarios rehabilitadores es devolver al máximo las capacidades locomotoras al paciente y mejorar su calidad de vida.
Para llevarlo a cabo, primero necesitamos conocer los objetivos y realizar una primera evaluación para poder diseñar un plan de rehabilitación.
Primera evaluación
- Anamnesis: historia de la lesión, otras patologías, medicación, dieta, actividad e información del ambiente.
- Examen físico completo (palpación, exploración neurológica y traumatológica).
- Fijar los objetivos.
- Plan terapéutico.
- Ejercicios de rutina para casa.
Tenemos que ser conscientes que todas las lesiones no se traten de la misma forma. Cada sistema, cada cuerpo, se adapta de forma diferente, por lo cual no podemos protocolizar sistemáticamente cada lesión.
Además, no todos los pacientes aceptan las mismas terapias o ejercicios.
Como decidir entre las terapias de radiofrecuencia INDIBA y la laserterapia K-Láser
CRAR somos un centro de referencia en rehabilitación veterinaria, por lo que tenemos una alta carga de casos (unos 20 pacientes diarios) que hace que utilicemos los dispositivos INDIBA y K-Láser varias veces al día.
El uso de la radiofrecuencia INDIBA y la terapia con K-Láser hace aumentar el metabolismo dentro de la célula, mejorando el transporte de nutrientes a través de la membrana celular. Además, incrementan la producción de energía celular (ATP), generando una cascada de efectos beneficiosos, con aumento de la función y salud celulares.
La combinación de ambas terapias nos permite tratar diversidad de lesiones e individualizar cada escenario. Pero, ¿cómo elegimos entre ellas?
Bajo nuestra experiencia, habitualmente usamos el K-Láser en pacientes inquietos, en animales con pelaje nórdico, en situaciones de mucho dolor o estado de hiperalgesia, si necesitamos trabajar muchas cosas, mantenimiento de lesiones, curación de heridas o pacientes neurológicos.
En cambio, optamos por INDIBA para tratar regiones musculares grandes, normalmente en casos con alteraciones compensatorias, masajes, animales séniors, contracturas y tendinopatías.
Déjanos mostrártelo con ejemplos prácticos.
Casos clínicos de radiofrecuencia INDIBA y K-Láser
Tresca
Tresca es una perra esterilizada cruzada de Collie de 8 años que es paciente de CRAR desde 2020.
Entre los 6 meses de edad y el año y medio empezó con cojera intermitente de la extremidad anterior derecha después de hacer actividad. Se le diagnosticó displasia de codo (fragmentación del proceso coronoides medial del cúbito).
Se le ha hecho artroscopia, donde se ha visto osteoartrosis y pocos signos de tendinopatía bicipital, y terapia con células madre, además de infiltraciones de PRP. Ha tenido buena respuesta a las infiltraciones de PRP, pero la cojera continuaba apareciendo.
Cuando Tresca llegó a CRAR, en la primera valoración se observó:
- BCS 6/9
- Disminución del ROM en el trote en la extremidad anterior derecha.
- Atrofia muscular leve en región escapular.
- Disconfort en codo medial a la palpación.
En la tabla que compartimos a continuación puedes ver el “Timeline” de la terapia de rehabilitación de Tresca en CRAR:
En este caso, hasta que no optimizamos la combinación de la radiofrecuencia INDIBA con el K-láser no hubo una mejora en la cojera, y se consiguió un buen mantenimiento gracias al compromiso de la familia de Tresca en sus sesiones de mantenimiento, los ejercicios que realizan en casa y el control del peso.
Koi
Koi es un gato macho castrado de raza europea de 2 años y medio, que en octubre de 2023 cayó de un 5.º piso.
Debido al traumatismo se hizo una fractura de cizallamiento de la placa caudal de L5 y subluxación vertebral del espacio L5-L6 que producía una desviación del canal espinal hacia la izquierda, compresión de la médula espinal y aumento de la densidad compatible con trauma espinal.
Koi pasó por quirófano, sin complicaciones durante la cirugía. Le realizaron una laminectomia dorsal L5-L6 y estabilización mediante agujas y cemento.
Se consiguió una buena alineación, y a pesar de que se observaba un hematoma en el canal vertebral, la médula espinal estaba en buenas condiciones.
El plan de rehabilitación que hicimos para Koi fue:
- Desbloqueo de la restricción lumbar en zona lumbo-sacra que afecta a la posición corporal y la función de prolongación de las extremidades posteriores. Este punto lo trabajamos con radiofrecuencia INDIBA.
- Reflejo patelar/femoral: disfunción L4-L6, inervación del cuadriceps-extensión de la rodilla. También afecta la posición. Lo trabajamos con laserterapia.
- Bioestimulación / Control del dolor
- Compensaciones: acortamiento de los isquiotibiales, activación de los músculos pectorales y braquiales del bíceps.
Los puntos 3 y 4 los tratamos con radiofrecuencia, laserterapia, ejercicios y terapia manual.
Con una sola sesión de rehabilitación, Koi ya era capaz de mover mejor la cola, así como la extremidad posterior derecha. Además de presentar un reflejo positivo de gastrocnemio en la extremidad posterior derecha.
En la quinta sesión de rehabilitación ya era capaz de mover la cola y saltar, las respuestas posturales estaban presentes en ambas extremidades posteriores. El reflejo patelar estaba presente en EPE y reducido en la derecha.
Conclusiones
Rehabilitar una lesión en un animal implica tener en cuenta todo su cuerpo y los factores ambientales.
No existe una única terapia o protocolo que funcione para todo, los dispositivos INDIBA y K-Làser permiten cubrir las deficiencias del otro, convirtiéndolas en una combinación de terapia muy completa.
Por último, queremos recordar que las herramientas de rehabilitación no nos hacen ser expertos en rehabilitación, la formación y adecuarlas a un plan de rehabilitación y unos objetivos será lo que marcará la diferencia.