Caso realizado por Marina Gonzalo Morata, veterinaria rehabilitadora de CRAR
Este mes en el blog de CRAR – Centro de Rehabilitación Animal de Referencia, especialistas en fisioterapia veterinaria en Barcelona te presentaremos un caso de luxación vertebral en un perro.
En este artículo, exploraremos las causas y el diagnóstico de la luxación vertebral en perros, así como presentaremos un caso clínico donde verá los ejercicios de rehabilitación que utilizamos en este tipo de pacientes.
Causas de luxación vertebral en perros y gatos
Las fracturas y luxaciones vertebrales suponen la mayor causa de disfunción o alteración neurológica en pequeños animales.
La lesión del tejido neuronal se debe a un daño mecánico primario del parénquima y de la vascularización asociada (contusión, compresión, laceración, hemorragia e isquemia) ya uno daño secundario caracterizado por alteraciones bioquímicas (fallo celular, alteraciones de la permeabilidad de las membranas, producción de radicales libres, citotoxicidad, daño oxidativo e inflamación) que resulta en necrosis celular.
Las causas de estas fracturas y luxaciones en perros y gatos son variables: atropellos, caídas, mordeduras y lesiones por proyectiles, que habitualmente desencadenan sobre las vértebras diferentes fuerzas: compresión, torsión, tracción y/o flexión/extensión.
Diferencias entre perros y gatos
En un estudio comparativo realizado en 2009 por Bali MS se apreciaban diferencias significativas en la causa de estas lesiones entre perros y gatos:
- La primera causa en perros son los atropellos (53%) mientras que en gatos son las caídas (41%). Lo que determina, también, una diferencia en el tipo de lesiones sufridas, siendo las luxaciones más frecuentes en perros (20%) que en gatos (6%), y las fracturas asociadas a luxaciones más habituales en gatos (65%) que en perros (37%).
- También existen diferencias en cuanto a la edad de los pacientes, existiendo una frecuencia mayor de lesiones espinales entre animales jóvenes en los gatos (45%) que en los perros (21%).
- Además, el porcentaje de lesiones concurrentes o simultáneas también es superior en gatos (83%) que en perros (66%), e incluso en perros pequeños (76%) que en mayores (58%).
- En cuanto a la gravedad de la lesión neurológica asociada al traumatismo, parece que las lesiones más graves se daban en la especie felina.
Diagnóstico y tratamiento de luxación vertebral en perros
Los factores que determinan el tipo de tratamiento (conservador o quirúrgico) a seguir son:
- Inestabilidad vertebral.
- Compresión medular.
Por tanto, deberemos hacer pruebas complementarias para determinar estos factores.
Las pruebas de imagen pueden evidenciar fácilmente la existencia de compresión medular, pero la inestabilidad necesita una valoración más compleja y, a veces, subjetiva. En medicina humana se utiliza con éxito la teoría de los tres compartimentos para valorar la existencia o no de inestabilidad vertebral.
Teoría de los tres compartimentos para valorar inestabilidad vertebral
La teoría de los tres compartimentos consiste en dividir la vértebra en tres compartimentos:
- Dorsal: constituido por la lámina, procesos espinosos y sus ligamentos asociados.
- Medio: compuesto por el ligamento longitudinal dorsal, porción dorsal del anillo y córtex dorsal del cuerpo vertebral.
- Ventral: constituido por el ligamento longitudinal ventral, la porción ventral del anillo y el córtex ventral del cuerpo vertebral.
La inestabilidad se produciría cuando dos o más de estos compartimentos estuvieran afectados.
Pruebas de imagen para diagnosticar la luxación vertebral en perros
En cuanto a las pruebas de imagen:
- Las radiografías tienen una sensibilidad de alrededor de 75% en la detección de fracturas vertebrales/luxaciones (FVL).
- La tomografía computerizada proporciona un detalle óseo excelente y puede identificar FVL no visibles en las radiografías.
- La resonancia magnética (MR) proporciona información detallada sobre el estado de la médula espinal.
Debe tenerse en cuenta que la mielografía debe evitarse en el caso de animales con VFL ya que puede causar ataques epilépticos y deterioro de la función neurológica.
Tratamiento de luxación vertebral en perros
Una vez ya sabemos los detalles diagnósticos, es necesario decidir el tratamiento más adecuado.
En FVL estables podría realizarse un tratamiento conservador basado en estricto reposo de 6 a 8 semanas. Sin embargo, cuando existe inestabilidad o existe compresión medular (extrusión discal o hemorragia) el tratamiento quirúrgico será el indicado.
Terapia de rehabilitación de luxación vertebral en perros
Para explicaros la terapia de rehabilitación en este tipo de lesiones utilizaremos un caso clínico, el de Coco, un perro de un año de edad que, a consecuencia de una caída desde una altura de 5 metros, va sufrir una luxación entre T9-T11.
Coco fue operado en IVC Evidensia – Hospital del Mar y en el momento del alta quirúrgica presentaba paraparesia ambulatoria, con dificultad para levantarse y sentarse. Los compañeros del departamento de traumatología de IVC Evidensia – Hospital del Mar y Hospital Veterinario Molins refirieron el caso a CRAR para realizar terapia de rehabilitación y así ayudar a Coco en su recuperación.
Primera valoración y objetivos del caso de Coco
En la valoración funcional que se le realizó observamos:
- Leve hipersensibilidad en la palpación de la herida.
- Paraparesia ambulatoria moderada.
- Marcha hipermétrica.
- Reposición disminuida en ambas EEPP.
- Reflejos espinales aumentados en estación.
- Aumento del reflejo extensor bilateral, sobre todo EPI.
- Tensión muscular en primeras lumbares.
Los objetivos de la terapia de rehabilitación que nos marcamos en el caso de Coco fueron:
- Control dolor/inflamación.
- Equilibrar tono flexor-extensor EEPP.
- Restaurar la función neurológica y respuestas propioceptivas.
- Mejorar trofismo muscular.
- Reeducación postural y de la marcha.
Plan de rehabilitación de Coco
Una vez realizada la valoración funcional y marcados nuestros objetivos, sólo nos quedaba estructurar nuestro plan de rehabilitación personalizado, que en el caso de Coco se basó en realizar entre 1 y 2 sesiones semanales de:
- Radiofrecuencia Indiba y láser: aumenta el metabolismo dentro de la célula, mejorando el transporte de nutrientes a través de la membrana celular. Además, se incrementa la producción de energía celular (ATP), generando una cascada de efectos beneficiosos, con aumento de la función y salud celulares.
- Terapia manual: La terapia manual sirve tanto para detectar cualquier alteración como para obtener información y tratar muchas patologías. En CRAR enseñamos ejercicios concretos de masaje a los cuidadores para que puedan realizarlos en casa en las rutinas de rehabilitación. La implicación de las familias es imprescindible para conseguir una buena evolución de los pacientes.
- Cinesioterapia activa asistida: tratamiento mediante movimientos activos, que involucra al paciente en la tarea (voluntaria) de realizar una contracción muscular y/o movimiento corporal. Este tipo de terapias mejora el arco de movilidad activo y pasivo, la masa/fuerza/resistencia muscular, la propiocepción, el equilibrio, la coordinación, la resistencia cardiovascular; además ayuda a reeducar la marcha y favorece la pérdida de peso.
- Cinta terrestre.
- Circuito propioceptivo: Los ejercicios propioceptivos son una parte importante de la terapia de rehabilitación del sistema nervioso. Estos ejercicios ayudan a mantener el equilibrio y la coordinación, siendo esenciales para el buen funcionamiento físico de los pacientes.
- Campos magnéticos pulsátiles: se generan mediante la aplicación de pulsos eléctricos a una bobina de alambre y se utilizan en rehabilitación para tratar una variedad de afecciones músculo-esqueléticas y neurológicas. Los CMP estimulan la regeneración del tejido óseo, reducen la inflamación y el dolor, mejoran la circulación sanguínea y el flujo linfático, y estimulan la producción de colágeno.
Evolución de Coco
La evolución de Coco ha sido muy buena, como podrás ver en el vídeo, hemos logrado cumplir con los objetivos de control del dolor y la restauración de las funciones neurológicas.
Actualmente, todavía estamos trabajando en la reeducación de la marcha y el control neuromotor inhibitorio-excitatorio. Además de trabajar en los puntos de tensión compensatorios que sufre en tríceps y trapecios torácicos.
Estamos muy contentas con el trabajo realizado por Coco, que ya puede realizar sus sesiones de fisioterapia sin bozal, lo que era impensable al principio.
Referencias
- LAS FRACTURAS Y LUXACIONES VERTEBRALES EN GATOS Y OTROS PEQUEÑOS ANIMALES. Tomás Fernández González DVM PhD. Congreso SEVC Granada 2016
- ENFERMEDADES AGUDAS DE LA MÉDULA ESPINAL-CUANDO LA SOLUCIÓN NO ES NEUROCIRUGÍA. Elsa Beltrán. Congreso SEVC Madrid 2018
- Comparative study of vertebral fractures and luxations in dogs and cats. Bali MS, Lang J, Jaggy A, Spreng D, Doherr MG, Forterre F. Vet Comp Orthop Traumatol 2009